Autor
Higinio Basterra / Hnos Jimeno
Peso
7 kg
Año de creación
1930
Año de renovación
1974
Yo también nací sin nombre. Soy ‘La cabezuda’, la de toda la vida. Nací en 1930 y nunca he faltado a la cita. Me llaman La Rubia, pero he de decir que no siempre he tenido ese nombre. Ahora de rubio tengo poco, porque prefiero el tinte azabache. Pero aún así mantengo el apodo para confundir a la gente.
En los años 80 y 90, cuando las rubias arrasaban, yo me apunté a la moda. Aunque mi rubio teñido era más brillante que el oro del Rey de la Baraja. Sí, era un tinte demasiado artificial para mi gusto.
Desde los 90 y hasta 2022 fui la única cabezuda, por la desaparición durante 20 años de mis compañeras. Vitoria-Gasteiz se olvidó de ellas. Incluso, en el centenario de la comparsa (2017) me obligaron a interpretar tres papeles: yo era al mismo tiempo La Rubia y mis compañeras La Vieja (mi abuela) y La Señorita… ¿Os podéis creer?
Por suerte ambas han vuelto ya y ahora los seis volvemos a estar juntos, como lo estuvimos desde 1930. Ah, y si miras alguna foto de nuestro nacimiento en 1929, verás que nos parecemos poco o nada a nuestros originales. Es normal, porque el artista fallero que nos rehizo en 1974 se sirvió solo de unas fotos y quiso al mismo tiempo darle un toque más realista a nuestras cabezas. 11.800 pesetas costamos en 1974 cada uno, mucho más que las 583 pesetas de nuestro nacimiento en 1930.